Es aquella que llena las almas y que también las parte. Es aquella que es capaz de elevarnos o hundirnos sin que haya defensa ni antídoto posible a sus desmanes. Es aquella que nos permite soñar que todo es posible. Es aquella que enamora sin aritificios, solo con versos. Es la llave a la imaginación. Es la que permitió a Enma Bovary creer que la luna solo existía para alumbrar su alcoba...
Palabras ... para que tu corazón abras.
ResponderEliminarCierto, Guada.
ResponderEliminarCierto, las palabras llenan, vacían, tienen el poder de crear y romper. Muy bonito, me gusta. Besos.
ResponderEliminarHola, Guada. Coincidimos en muchos conceptos. Me gusta mucho tu texto, me llega. Sin embargo (me parece que se aprende más cuando nos señalan lo que no gusta que solo cuando se alaba), me parece que la última frase desentona, rompe el ritmo, chirría (aunque estoy de acuerdo con lo que dice). Y la frase que señalaste... sencillamente genial. Enhorabuena.
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